Necesidad de aprender a Estar presente con las emociones dolorosas

 

Vivimos en una sociedad en la que tratamos por todos los medios de evitar sentir las emociones dolorosas o difíciles como: inquietud, aburrimiento, tristeza, culpa, rabia, miedo…. etc. Tenemos muchas formas de distraernos para no sentir. Hemos aprendido desde bien pequeños/as a evitarlas pensando que así desaparecerían.

La vida nos enseña que ésto no es así, que las emociones reprimidas vuelven una y otra vez. ¿Por qué será? Quizás tenemos que aprender algo, comprender algo y para eso tenemos que pararnos por un momento a observar las emociones que surgen en nosotros/as. Estar presentes (mindfulness) con ese sentir aunque sea doloroso. Estar presentes de una forma amable, sin juicios, sin interpretaciones tan solo observando las sensaciones físicas que produce la emoción en nuestro cuerpo. Obervar la emoción no quiere decir que te dejes arrastrar por ella. Esto requiere un tiempo de atención amable a esa parte de nosotros/as que sufre. Requiere dar importancia a lo que está pasando dentro de nosotros/as. Requiere identificar la necesidad de atendernos, de hacer un stop. Un stop necesario para poder continuar el camino. Continuar el camino con una nueva comprensión.

María Isabel Fernández

Psicóloga especialista en Minfulness y Desarrollo Personal

www.psicologapas.com